Un año más, desde el año 1978, Laguarta recupera su jornada festiva... de esta manera, aquellos jóvenes que, en la década de los ochenta, se reencontraron con su pueblo, recuperaron su escuela, arroparon a sus mayores, disfrutaban nuevamente de sus raíces... ahora ya "abuelos" nos embarcan a las nuevas generaciones en continuar con la tradición. Deberemos saber todos, y más si se ha leído la literatura del lugar, que el "Patrón chico" de Laguarta, alguna vez lo fue grande. Pero ya antes de la Guerra, sus fiestas se cambiaron a las celebradas en Honor a la Virgen del Pilar. La explicación nos resultará simple. El seis de agosto, en estas tierras montañesas, se estaba en el tajo, plena siega... y a lo sumo, les permitía trabajar hasta el medio día al menos, para llegar a cumplir con el mosén, jugar un partido de pelota, una lifara... y a faenar de nuevo... Ante tales circunstancias, y semejante panorama, algunos quintos "espabilados" decidieron